El Estado Policial marca un nuevo hito en Australia
El Estado Policial Covid de Australia se está poniendo realmente muy serio
Los australianos están siendo obligados a proporcionar a la policía selfies geolocalizables para demostrar que están en cuarentena
En una medida que vuelve a poner de manifiesto la tiranía total en la que se ha convertido Australia a raíz de la COVID, los ciudadanos están siendo obligados a proporcionar selfies geo-rastreables a la policía para demostrar que se quedan en casa.
Un informe de 9 News en Australia detalla cómo la gente en Victoria está ahora obligada a responder a las autoridades dentro de los 5 minutos de su llamada al azar enviando un selfie de sí mismos en casa. Si no responden, se envían matones de la salud a su dirección para repartir sanciones.
El periodista señala que "hoy se ha hecho un llamamiento a todas las personas en cuarentena domiciliaria en Victoria para que participen en un programa piloto. Y lo que eso significa es que recibirán llamadas telefónicas al azar y tendrán que responder en un plazo de cinco minutos con un selfie enviado a una aplicación que luego hará un seguimiento geográfico de dónde está esa persona y para asegurarse de que es quien dice ser también."
"Si no contestan en los cinco minutos es cuando los ministros de sanidad llaman a la puerta", añade espeluznantemente el reportero.
Reuters informó sobre el plan a principios de este mes, señalando que se está probando en "Nueva Gales del Sur (NSW) y Victoria, hogar de Sydney, Melbourne y más de la mitad de los 25 millones de habitantes de Australia".
La tecnología empleada utiliza el reconocimiento facial, pero las autoridades sanitarias se han negado a comentar el plan.
Reuters señala que "con el sistema que se está probando, las personas responden a las solicitudes de registro aleatorias haciéndose un 'selfie' en su dirección de cuarentena designada. Si el software, que también recoge datos de localización, no verifica la imagen con una "firma facial", la policía puede hacer un seguimiento con una visita al lugar para confirmar el paradero de la persona".
Es algo que se sugirió anteriormente para su uso en Gran Bretaña, pero se abandonó por temor a la invasión de la privacidad.
Un auténtico decreto de vigilancia del gobierno.
Australia’s Covid Police State Is Getting Very Serious Indeed