Un tribunal de Darmstadt ha devuelto a la familia Wunderlich la custodia de los hijos que le había sido 
arrebatada debido a que los padres habían optado por un modelo de educación en casa, prohibido en Alemania desde 1919.
El Tribunal Europeo de Derechos humanos había fallado el pasado mes de enero en contra de la familia, interpretando que no se habían violado los derechos de la familia cuando más de 30 agentes de policía y trabajadores sociales entraron en su casa en 2013 y sacaron a la fuerza a los menores.

Una revisión del caso en Alemania -y la recusación de un juez sustituido por parcialidad-, ha devuelto a Dirk y Petra Wunderlich la custodia de sus hijos.
Para ello fue necesaria una nueva vista en la que los dos hijos menores del matrimonio expresaron su deseo de ser educados en casa, conforme a los principios filosóficos y morales de sus padres.
«No estoy dispuesto a asistir a una escuela pública simplemente porque los jueces alemanes no puedan imaginar que me eduquen de una manera diferente. No toleraré que me tomen a la fuerza y me encierren», escribió en una carta uno de los hijos, de 10 años de edad.
Su hermano, aseveró: «Sólo quiero vivir y aprender en paz con mi familia sin el temor constante de ser desplazado como en 2009 y 2013. Fui a la escuela pública durante un año y, definitivamente, no lo disfruté».
La familia interpuso en abril que la Corte Europea de Derechos humanos remitiera a la Gran Sala el caso y se encuentran a la espera de una respuesta.
Robert Clarck, director para Europa de Alliance Defending Freedom ha asegurado que «el derecho a dirigir la educación de sus hijos es un derecho fundamental, protegido por el derecho internacional. Nos complace ver que la corte alemana respetó este derecho y reconoció que los niños Wunderlich están bien».
Clarck añade que «mientras esperamos la remisión a la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, esperamos que también allí se protejan los derechos de la familia Wunderlich».
Más de 50.000 apoyos
Más de 50.000 personas se han sumado a una campaña en defensa de la libertad educativa y de apoyo a la familia Wunderlich lanzada por ADF internacional a través de CitizenGO y a la que aún se pueden seguir sumando apoyos.
La campaña está dirigida a Katarina Barley, ministra federal de Justicia y Protección de los Consumidores de Alemania, y se le reclama que «el Gobierno alemán y las autoridades protejan el derecho fundamental de la privacidad y la vida familiar, reconozcan la libertad de los Wunderlich a educar a sus hijos, y que finalmente termine esta caza de brujas que están sufriendo estos padres».