La Cámara de Diputados de la Nación le dio media sanción y giró al Senado el régimen que regula el ejercicio profesional de la obstetricia, una de las condiciones impuestas por el Banco Interamericano de Desarrollo para liberar los pagos del primer préstamo mundial para “impulsar políticas de género”. Dentro de los compromisos que nuestro país debe cumplir se encuentra la implementación de la ESI, la aprobación de la Ley del ejercicio profesional de la Obstetricia y el fortalecimiento de políticas para el acceso a la interrupción legal del embarazo.
Diputados aprobó la Ley que regula la profesión de los licenciados en obstetricia, buscando “contribuir a garantizar los derechos sexuales y reproductivos de las personas, desde un enfoque de derechos humanos y perspectiva de género”. El texto establece el marco general del ejercicio de la práctica, basada en los “principios de integridad, ética, bioética, idoneidad, equidad, colaboración y solidaridad, aplicados a la asistencia, acompañamiento y cuidado de las personas usuarias del servicio de salud” que atraviesen “cualquier evento obstétrico”.
De acuerdo a las intervenciones de los legisladores que promovieron esta Ley, Carmen Polledo destacó que “tiene por objeto establecer el marco general para el ejercicio de la profesión“, Amadeo aseguró que “La mortalidad materna hoy es de 29 muertos por cada 100 mil nacidos vivos”, Mónica Macha celebró que ahora se va a “garantizar la perspectiva de género en la atención” y Silvia Lospennato destacó que “es una ley con profundo sentido feminista”.
Entre los alcances de la profesión se estipula que podrán “realizar acciones de promoción de los derechos sexuales y los derechos reproductivos tanto en el ámbito de la salud como en el ámbito educativo”, así como “asesorar y prescribir métodos anticonceptivos y realizar intervenciones relacionadas con ellos, incluyendo la colocación y extracción de métodos anticonceptivos de larga duración”.
En el artículo 11 inciso “m” se especifica que a partir de ahora podrán “prescribir y administrar fármacos según vademécum obstétrico en vigencia“, una forma elegante de abrirle la puerta al Misoprostol.
La mano detrás de la Ley de Obstétricas
En octubre de 2018, desde El Disenso adelantamos que luego de la caída de la IVE en el Senado, el BID otorgó a la Argentina el primer préstamo mundial para “impulsar políticas de género”. En el perfil oficial del proyecto se detallan los objetivos que nuestro país deberá cumplir dentro de la agenda de género.
De acuerdo a la documentación de este préstamo, para obtener cada erogación, el gobierno debe asegurar el cumplimiento de etapas que incluyen hasta el tratamiento de leyes en el Congreso como es el caso específico de la Ley de Obstétricas, finalmente aprobada hoy en diputados y girada a Senadores.
El préstamo no oculta su apoyo a la implementación de la IVE, argumentando que es necesario incrementar la posibilidad de las mujeres de llevar una vida libre de violencia y de gozar plenamente de sus derechos reproductivos, haciendo hincapié en “despenalizar el aborto para garantizar que las niñas tengan acceso a abortos seguros y servicios posteriores“.
El acuerdo entre Argentina y el BID fue rubricado en marzo de 2018 por el entonces Ministro Caputo. El préstamo tiene un período de amortización de 20 años, un período de gracia de 5,5 años y una tasa de interés basada en LIBOR.
Luego de caída la IVE en el Senado, el BID viene a reemplazar la billetera de la IPPF, que parece no haber alcanzado a lubricar las suficientes voluntades como para que el proyecto de ley fuera aprobado en la cámara alta.
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